Bob
es un representante de la empresa Suministros Mortuorios Para Huéspedes Celestiales,
mientras se dirige a entregar un encargo al depósito de cadáveres de Hillcrest se
encuentra con una persona atropellada agonizando que, misteriosamente, tras ser
rociada con unos polvos que tiene en su bolsillo, se recupera milagrosamente de
las heridas ya que esos polvos mágicos podrían incluso resucitar a los muertos.
El
director de esta película es el desconocido Jim Goodman que solo ha dirigido
esta película y ha sido director de segunda unidad y primer asistente de director de un puñado de
otras, ninguna relevante
Entre los
actores encontramos a: Mark Jeffrey Miller (Terror
en la Autopista 91, Las Tortugas Ninja, El Gran Salto, El Patriota), Edgard
Allan Poe IV (El Cabo del Miedo, La Marca
del Asesino, Shadow People), Kerstin Steinbach (Inmortal, Bröderna Karlsson, Strandvaskaren (comentada en este blog
en Abril del 2009)
Estamos
ante una cinta que mezcla terror, humor y zombies y os diréis: Ehhhhhhh… de puta madre… Pues no tanto
ya que, por desgracia, aquí los zombies están casi de adorno y en vez de miedo
dan risa (por lo cutres y porque incluso se marcan algún numero musical) así
que aquí los zombies no son precisamente un aliciente porque, a fin de cuentas,
esta es otra película en que los protas van muriendo poco a poco (y alguno de
ellos muy poco a poco).
Esta película, en realidad, más parece un producto de los ochenta que de la época en que fue rodada (1997), es
de agradecer ver una de esas pelis que mezclaban terror y humor que ya no se
hacen, ahora hacen parodias de pelis de terror pero sin el terror (aunque
reconozco que las pelis antiguas tampoco daban miedo, pero al menos lo
intentaban). Hay que señalar que esta película da mas risa que miedo, por
ejemplo, hay una escena en la que en una sesión de Ouija se aparece el mismo diablo
y, la verdad, a mi me pasa y me descojono allí mismo (foto inferior).
Las
actuaciones son bastante lamentables en su totalidad, el guión no es malejo
aunque está plagado de chistes fáciles, la labor del director es bastante cutre
ya que repite planos varias veces en diferentes momentos de la cinta y usa
topicazos a saco, el rito es bastante deficiente: comienza muy leeeeeentaaaa y tiene un final
tan atropellado que te deja con la sensación de que hay algo que no ha acabado
de funcionar bien.
Si
os animáis a verla (la podréis encontrar en castellano como La Mansión Maldita) tendréis algo de
sangre, algo de gore y algo de tetas y culos, unos zombies que corren que se
las pelan (ya estaban de moda), la fuga carcelaria mas inverosímil y peor
rodada de la historia del cine, un diablo esquelético con sobrepeso (foto
inferior), un montón de arañas que pintan poco o nada en la peli (o el bueno de Jim Goodman era un friky de las arañas o alguno de sus colegas) y una escena plagiada completamente de Evil Dead II (Terroríficamente
Muertos) ¿Cuál? Os preguntareis, pues la de la mano poseída evidentemente.
DEAD INN
Lo
Mejor: Los muñecos de plástico, los maquillajes de los zombies, y el diablo
obeso del lago, un descojone asegurado.
Lo
Peor: Que tendréis que esperar tres cuartos de hora a que empiece lo
interesante.
Puntuación:
2
El
Buen Doctor Afirma: Para el siguiente post prometo alguna bizarrada que no
conozca ni el Tato, algo totalmente alejado de cualquier cosa que pudiese
llegar a vuestros videoclubs mas cercanos o a vuestros videos comunitarios, estén
atentos a sus pantallas, quiero decir, a este blog.
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