Preguntamos a sus vecinos y solo recibimos negativas por respuesta: “Hace días que no le veo…” “No tengo ni idea de donde puede estar” “Ya decía yo que hacía tiempo que no le escuchaba dando porculo” Eran las descorazonadoras palabras que nuestras mentes no asimilaban. Una frase se nos clavó profundamente en nuestros corazones, la pronunció uno de sus mejores amigos: “Simplemente se fue”.
Azorados, no quisimos creer que simplemente había desaparecido, que nos había dejado para siempre, que ya no disfrutaríamos nunca mas de su compañía y de sus palabras; así que hicimos un juramento, no permitiríamos olvidarnos jamás del asunto, lo encontraríamos fuese donde fuese y viajaríamos a cualquier parte donde pudiese haber ido… o a cualquier parte donde se lo hubiesen llevado… Esa posibilidad nos pareció tan dolorosa que no quisimos ni planteárnosla.
Comenzamos nuestro viaje un poco sin saber a donde ir… ¿Qué había podido hacerle marchar sin dar explicaciones? ¿Qué necesitaba un hombre con su fama, éxito y dinero para llegar a ser feliz? Solo se nos ocurrió una cosa: la inmortalidad, es lo único que no podía tener, así que empezamos la búsqueda por el único ser inmortal conocido: Jordi Hurtado, y en efecto, El Buen Doctor deseaba conseguir el elixir de la Vida Eterna y consiguió una pista gracias a él, debía viajar a la ciudad de Kun Lun. Para cuando llegamos al Tibet la ciudad ya había dejado nuestro plano existencial y volvimos a quedarnos sin pistas hasta que en el cercano pueblo de Lao-re encontramos a un anciano que nos dijo haberlo visto.
Al parecer lo encontró en un valle cercano, cubierto totalmente de sangre, con los testículos de un Yeti en las manos; aseguraba haber conseguido uno de los elementos necesarios para su poción, que esto estaba siendo más fácil de lo que había previsto, y delirando se alejó cantando una extraña canción acerca de extraños lugares de los que el anciano jamás había oído hablar; con amable sonrisa nos cantó la extraña canción y ahí comenzamos una búsqueda que nos llevó a través de medio mundo.
En una zona remota de la India nos contaron que recientemente un extranjero descubrió la Tumba de Alejandro y que tras saquearla la hizo volar en pedazos, cerca de Borneo el mismo extranjero visitó la isla perdida de las Mujeres Caníbales, cohabitó con ellas un tiempo y obtuvo una rara flor llamada Rafflesia. En los pedidos desiertos del Sahara consiguió una rara especia, en el África profunda combatió con el Mokele Mbembe y, por supuesto, le arrancó los testículos; un sabio aborigen australiano le contó un secreto al oído y apareció con una cogorza espectacular en Israel donde vomitó en el muro de las lamentaciones.
Ahí le perdimos la pista, las autoridades israelíes no quisieron darnos más datos de su paradero tras interrogarnos sobre nuestro posible parentesco con aquel ser blasfemo; viendo que habíamos llegado a un punto muerto decidimos volver a nuestras casas, con la vana esperanza de que un día nos llamara y nos dijera que había sido de él.
Cual fue nuestra sorpresa cuando volvimos y nos lo encontramos en su casa, como siempre, sentado en la cama, con un café muy caliente y un resacón de espanto; no le pareció extraña nuestra visita pero sí nuestras caras “¿Que os pasado, por qué reís como locos?” dijo sin inmutarse. Le explicamos nuestra peripecia tras él por todo el mundo y le reprochamos que se marchara sin avisar, pero lo que no sabíamos es que sí que nos había avisado, aunque a su manera, claro; en nuestros correos había un curioso mensaje en la carpeta de correo basura, rezaba: “No paséis a verme hoy que me ha salido un tema, ya os llamo yo si eso”. Lo bueno del asunto es que por fin El Buen Doctor ha regresado para quedarse, para hacernos esas críticas que tanto nos gustan a los amantes del Cine Bizarro con mayúsculas, así que a partir de Noviembre este blog vuelve a la vida, para deleite de algunos y decepción de todos los amantes del buen cine de calidad, para terminar publicamos una foto de una de las peripecias de este largo viaje y un breve resumen en sus propias palabras de lo que ha sido el viaje que finalmente ha durado casi un año:
“Puff, vaya peripecia, y al final todo para nada, es que este Jordi Hurtado tiene tela de guasa, me hizo viajar por medio mundo para conseguir unos ingredientes para un elixir de la eterna juventud que al final no valió para nada, me metí en una cueva con unos huesos malolientes que casi me cuesta la vida, muchachos no fuméis bajo tierra que por lo visto a veces hay unos gases una jartá de peligrosos; conseguí una flor que olía a perros muertos, unos cuantos huevos de los que prefiero no hablar y además un viejo en Australia me pidió rollo…tiemblo de solo recordarlo: eso si, lo de las mujeres caníbales era totalmente cierto, casi se me comen entero, dios... que experiencia"
Welcome Back, mein freund!!!!
ResponderEliminarYA ERA HORA!!!! El blog más casposo y divertido vuelve a la vida!!!
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